
Tristeza
La tristeza es una emoción adaptativa que nos ayuda a sanar y a integrar momentos de dificultad en nuestras vidas. Pero en otras ocasiones, cuando alguien se siente apático, solo o sin motivación, puede empezar a aislarse y a replegarse en sí mismo, llegando a manifestar sintomatología depresiva.
La depresión es un trastorno complejo que requiere de tratamiento a largo plazo. En terapia abordamos los diferentes aspectos de la tristeza, utilizamos diferentes herramientas buscando siempre la mejoría de la persona afectada.
La escucha activa es un mecanismo necesario en terapia para que la persona que acude a nosotros se sienta escuchada, comprendida y pueda desahogarse.
A veces la sociedad relativiza los sentimientos que consideran “desagradables”, haciendo que el que los padece no se sienta comprendido y acabe reprimiendo sus emociones y empeorando su problema.
En sesión tendrá cabida toda emoción. Es un espacio seguro y libre de prejuicio donde vamos a buscar que la persona pueda hablar y trabajar su apatía y dolor para llegar a conseguir esa mejoría tan deseada.